-
Aquí te vamos a compartir la receta, paso a paso, para que las cocines en casa y las compartas con tus seres queridos.
Se acerca la Semana Santa y en plena época de la Cuaresma, los olores de la miel de piloncillo, clavo y de canela nos recuerdan que es época de abstinencia y reflexión. Pero ¿en realidad es una penitencia este delicioso ayuno?
El ayuno comenzó prohibiendo la carne, al considerarse -por roja y caliente-, como una fuente de pecado, además de un signo de riqueza. Entonces, el pescado -frío y puro- aparece en la Edad Media para completar esta dieta rigurosa, a base de sopa de aceite, pan y agua, hasta pasar los días de la Semana Santa.
Pero en los días que corren, la indulgencia parece ser cada vez mayor con nuevas y ricas recetas que hoy forman parte de nuestra gastronomía de Cuaresma, con sopas, caldos y potentes guisos a base de verduras y pescados, siendo la capirotada el postre protagonista para comer cada viernes de Cuaresma y en Semana Santa.
En Sinaloa, la gastronomía popular de Cuaresma se prepara sin grandes mezclas, con ingredientes sencillos y comunes que se encuentran en la localidad: quelites, chiquelites, verdolagas, agua de pinole con lechuga, pan de mujer, coricos, colachito de calabaza, sopitas de tomates, chilaquiles, chiles rellenos de atún, ejotes con queso, torrejas; tortitas de papa, atún, camarón seco o de hueva de pescado; frijoles de la olla, gallina pinta, ceviche y aguachile, así como toda clase pescados y mariscos, frescos y secos; sin dejar de lado el queso y sus derivados (suero salado, requesón, jocoque, mantequilla de rancho) que se preparan con antelación para la Cuaresma. Y por supuesto: la suculenta capirotada (con tomate o sin tomate), los cortadillos de papaya, las aguamas y las apomas enmieladas; el dulce de calabaza, las melcochas, los jamoncillos o las pepitorias de cacahuate.
Las tortitas de hueva de pescado han ido desapareciendo con el tiempo del menú de Cuaresma; además, es poco común encontrar en los mercados la hueva de pescado, en especial la de lisa, motivo por el cual, las amas de casa, han dejado de preparar esta delicia por estas fechas.
Para recordar los sabores de este platillo, comparto con ustedes mi receta de familia:
TORTITAS DE HUEVA DE PESCADO
200 gr de hueva de pescado
2 tazas de leche entera
1 litro de agua
½ cebolla
4 dientes de ajo
Para la base de la tortita
30 ml Aceite vegetal
10 cucharadas de pan molido
2 huevos
1 tomate
1/3 de cebolla
½ rama de canela
Sal y Pimienta al gusto
2 Clavo de olor
1 pizca Comino
1 cucharada de caldo de pescado o de vegetales
Aceite vegetal, cantidad necesaria
Caldillo de tomate
3 tomates maduros
½ cebolla
2 dientes de ajo
1 chile serrano
4 pimientas negras
1 cucharada de cilantro picado
sal y pimienta al gusto
1 litro de agua
50 gr de masa de maíz nixtamalizado
Preparación
Para comenzar, quitamos la piel de la hueva de lisa y la dejamos reposar por 1 hora en leche (este procedimiento suaviza el olor y sabor de la hueva de pescado). Pasado este tiempo, enjuagamos con agua corriente y cocinamos con cebolla y ajo en agua caliente, durante 7 minutos. Desmenuzamos y reservamos.
Cortamos la cebolla y el tomate en pequeños cuadros, los llevamos a una sartén con aceite y sofreímos. Agregamos la canela, el clavo de olor triturado, comino, sal y pimienta. Licuamos con el caldo de pescado o de vegetales, hasta formar una pasta. Reservamos en un bol. Agregamos la hueva de lisa desmenuzada, el huevo y el pan molido. Hacemos las tortitas.
Freímos las tortitas en una sartén con aceite caliente, hasta que se doren.
Para el caldillo, ponemos en una olla con el litro de agua, los tomates, cebolla, pimienta, chile, ajo pelado; dejamos hervir por unos 5 minutos, agregamos el cilantro y retiramos del fuego; dejamos enfriar y retiramos la piel del tomate; licuamos, ponemos en una olla la salsa y la espesamos con la masa de maíz previamente disuelta en ½ taza de agua fría; dejamos hervir, sin dejar de mover con una cuchara de madera, y sazonamos con sal y pimienta.
Servimos las tortitas en un plato y bañamos con el caldillo de tomate.
