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A casi dos años del gobierno, el proyecto de la Biblioteca Gilberto Owen sigue congelado; el edificio ya presenta desperfectos.
Casi dos años de este gobierno no han sido suficientes para que se materialice el proyecto de la Biblioteca Gilberto Owen, que sigue congelado desde 2010, cuando se decidió sacarla del Centro Cultural Genaro Estrada para trasladarla, según anuncios institucionales, al Casino de la Cultura.
Pero nada de eso sucedió. Esa opción fue eliminada. Y también la propuesta de colocarla en el Parque Culiacán 87. La decisión final fue instalarla enseguida del Parque Temático, cuya construcción se realizó durante la administración pasada, pero nunca terminó de concretarse.
Hoy, la construcción semeja al color del que fue pintada: gris, gris con unos tintes lilas, por los que sólo ha pasado el tiempo. No resulta una novedad que ahora sufra desperfectos a simple vista, como pintura levantada, o cristales rotos.
Se trata de un elefante blanco que, con el paso de los días, se diluye entre las obras a las que ha dado preferencia este gobierno: conciertos masivos, puentes, carreteras… Pero, libros: no.
Desde que Papik Ramírez Bernal asumió la dirección del Instituto Sinaloense de Cultura, todo se ha quedado en discurso, ese mismo que se ha escuchado con los directores en turno, porque -incluso él mismo- anunció en rueda de prensa que en octubre pasado se retomaría su construcción, para tenerla lista hacia marzo de este año.
Nada sucedió. Llegó 2019 y ahora, con la reducción del presupuesto para cultura, nada pinta bien y mientras tanto la prometida biblioteca -que estaría al nivel de las mejores, con una oferta permanente de talleres, bibliografía especializada, ludoteca, cafetería, etc.- se ha quedado sólo en eso: en promesa.
Y esta es una realidad a inicios de Año Nuevo: la Biblioteca Giberto Owen: de olvido en olvido. Aquí la liga de un video anterior, que refuerza lo que se afirma: https://www.youtube.com/watch?v=qMjQxIVdIEg&t=69s
