Obras dañadas… hurtadas… olvidadas… Es lo que queda del proyecto “Miradores de arte”, planteado en 2009 para mejorar la ‘imagen’ de la ciudad.
Por Azucena Manjarrez
Corría el año de 2009 cuando Papik Ramírez, entonces director del Instituto Municipal de Cultura Culiacán, lo anunció con bombo y platillo: “Miradores de arte”, que serían instalados por el viejo malecón como un atractivo turístico. Desde entonces han pasado ocho años y este proyecto pasó del olvido al no me acuerdo, con los consiguientes directores.
Poco o nada se ha hecho por replantear esta iniciativa, digamos interesante, que en otros estados ha sido exitosa, de manera específica en ciudades como Puerto Vallarta, Mazatlán y Guadalajara. Pero aquí sucedió lo contrario. Aquí se quedó en el intento y algunas de las piezas fueron hurtadas, otras dañadas y en su conjunto definitivamente olvidadas.
Tales ‘Miradores’ no resultan ningún atractivo para nadie. Incluso su existencia se desconoce. No se encuentran aquellas personas que, en un principio, se pensó las visitarían o se tomarían la ‘foto’ en el sitio.
Recordemos que de un concurso en el que participaron 40 artistas con 81 propuestas, fueron elegidos los proyectos escultóricos de ocho creadores, unos cocidos y otros no tanto: Miguel Ángel Ojeda, Rafael Camacho, José Bañuelos, Alfredo Pérez Rivera, Luis González, José Fidel Cháidez, Pavel Aguilar y el equipo conformado por Moisés Cole, Fausto Verdugo y Cynthia Loaiza.
Junto con el Instituto de Planeación y la Dirección de Turismo Municipal, se proyectó mejorar la imagen de Culiacán, tema muy en boga por los políticos sinaloenses, porque incluso se arreglaron las luminarias y resanaron las medias lunas donde fueron instaladas.
Este proyecto no fue gratuito, ya que a cada artista se le ortigó la cantidad de 50 mil pesos: 30 mil para gastos de material y 20 mil como pago de honorarios. Pero desde entonces ni un centavo se ha invertido para restaurarlas.
Algunos de los participantes, en su momento, externaron su descontento por el ‘abandono’ del proyecto. Sin embargo nada pasó y hoy los Miradores de arte son otro proyecto perdido para la cultura y el arte en la ciudad. Recorrer el malecón viejo a partir del Parque Cívico Constitución, no es más que encontrarse con unas cuantas bancas a las que el paso del tiempo les ha cobrado la factura. Y la historia parece haberlas borrado de ella.
